Un trágico desastre aéreo ha sacudido a la India, ya que Air India ha confirmado que 241 de las 242 personas a bordo del vuelo 171 han perdido la vida tras un accidente devastador en el estado de Gujarat. El Boeing Dreamliner 787, que partió de Ahmedabad con destino a Londres Gatwick, se estrelló poco después de despegar, impactando un albergue para médicos en formación.
El vuelo despegó a la 1:40 p.m. hora local y apenas alcanzó los 600 pies de altitud antes de caer en un área densamente poblada, generando una explosión ensordecedora que fue captada en video. Los equipos de emergencia se apresuraron a la escena, donde se encontraron con un panorama desolador: edificios carbonizados y cuerpos siendo recuperados entre los escombros.
Entre los pasajeros se encontraban 53 nacionales británicos, de los cuales solo uno, un hombre de Leicester llamado Vishvash Kumar Romesh, ha sobrevivido milagrosamente. Actualmente está siendo tratado en un hospital, mientras su familia aguarda noticias sobre su hermano, quien también estaba a bordo.
Las autoridades continúan investigando las causas del accidente, aunque se ha señalado que el avión no generó suficiente sustentación para mantener el ascenso. La falta de información sobre el número de víctimas en tierra y la identidad de los fallecidos complica aún más la situación, ya que se estima que varios residentes también han perdido la vida en el accidente.
El primer ministro británico, Sakir Starmer, ha expresado sus condolencias y ha destacado el impacto de esta tragedia en familias de ambos países. En Ahmedabad, la comunidad ha mostrado su apoyo a los afectados, mientras que Air India ha prometido colaborar con las autoridades en las labores de rescate y en la investigación del incidente.
Este desastre representa un duro golpe para Air India, que ha estado trabajando para mejorar su imagen tras haber sido privatizada hace tres años. La compañía ha ofrecido compensaciones a las familias de las víctimas, pero las preguntas sobre la seguridad y la gestión del vuelo persisten en un momento de profundo dolor y pérdida.