Han pasado 16 días desde el atentado contra Miguel Uribe Turbay


Hoy se cumplen 16 días del atentado contra Miguel Uribe Turbay, y la angustia por su salud se intensifica. A las afueras de la Fundación Santa Fe, miles de ciudadanos, incluidos niños y jóvenes, se han congregado para elevar sus plegarias en un acto de solidaridad que clama por un alto a la violencia en el país. La lluvia no ha detenido a quienes continúan llegando con velas blancas, encendiendo luces de esperanza en medio de la adversidad.

Este miércoles, alrededor de las 4:30 de la tarde, la esposa de Uribe Turbay, María Claudia Tarazona, se unió a los presentes, agradeciendo su constante apoyo y pidiendo que mantengan la fe y la unidad en la oración. “Sigamos fuertes”, instó, mientras los rostros de los asistentes reflejaban tanto dolor como determinación.

La conmoción no solo se siente en los adultos; un niño de 12 años, desde Suacha, se hizo presente con música, pidiendo no solo la recuperación de Miguel, sino que ningún otro niño tenga que sufrir el dolor que hoy atraviesa Alejandro, su pequeño hijo. “Es un momento difícil, pero debemos dar aliento”, expresó con una voz que resonó entre los presentes.

Un grupo de jóvenes también aportó su granito de arena, entregando una virgen pintada por ellos como símbolo de empatía y un mensaje claro: “No más violencia”. Este acto de amor y unidad resuena con fuerza, subrayando que la juventud del país se niega a aceptar la violencia como parte de su realidad.

Mientras las velas siguen encendidas y las oraciones se elevan, la comunidad espera un milagro por la vida de Miguel Uribe Turbay. La lucha contra la violencia continúa, y la esperanza se mantiene viva en cada rincón de este altar improvisado. La situación es crítica, y el clamor de la ciudadanía es inquebrantable: ¡Basta de violencia!