**El legado sombrío de Felipe Calderón: Un presidente atrapado entre la guerra y la culpa**
Felipe Calderón, el expresidente de México, está nuevamente en el centro de la controversia a sus 62 años, a medida que resuenan las sombras de su mandato (2006-2012) marcado por una guerra contra el narcotráfico que dejó más de 120,000 muertos y miles de desaparecidos. Su legado, envuelto en escándalos y decisiones cuestionables, se complica aún más con la reciente condena de su exsecretario de seguridad pública, Genaro García Luna, por vínculos con el cártel de Sinaloa.
La historia de Calderón es la de un hombre que, impulsado por la ambición y la presión familiar, se convirtió en un líder en un momento crítico para México. Desde su ascenso al poder, su decisión de militarizar la seguridad pública transformó al país en un campo de batalla, donde la violencia se convirtió en la norma. A pesar de sus intenciones de erradicar el narcotráfico, la guerra que proclamó ha sido criticada por sus devastadoras consecuencias.
La reciente confirmación de la relación entre Calderón y García Luna ha reavivado el debate sobre la ética de su gobierno. Mientras Calderón niega haber tenido conocimiento de los crímenes de su excolaborador, las evidencias apuntan a un entramado de corrupción que se extendió hasta las más altas esferas del poder. La lucha por la paz y la justicia se ha visto empañada por el escándalo y la desconfianza.
Hoy, Calderón busca redención en el ámbito académico, reflexionando sobre un legado que lo ha marcado profundamente. A medida que México enfrenta nuevos desafíos, la pregunta persiste: ¿cómo será recordado un presidente cuya administración estuvo plagada de decisiones que cambiaron el destino de un país? En un momento en que las cicatrices de su mandato aún laten, el futuro de Calderón y su legado sigue siendo incierto.