**Carlos Salinas de Gortari: El Expresidente Mexicano que Convirtió la Política en un Escándalo de Corrupción**
A los 77 años, Carlos Salinas de Gortari, el expresidente mexicano cuya gestión estuvo marcada por un legado de controversia y corrupción, vuelve a ser objeto de atención mediática. Su ascenso al poder en 1988, acompañado de promesas de prosperidad, se transformó rápidamente en un oscuro capítulo de la historia de México, donde miles de millones de dólares desaparecieron y la desconfianza hacia el gobierno se instauró en la sociedad.
Salinas, un tecnócrata educado en Harvard, asumió la presidencia con una sonrisa, pero su mandato se vio empañado por acusaciones de fraude electoral y un sistema que favorecía a una élite privilegiada. La elección de 1988, conocida como “la caída del sistema”, dejó a millones de mexicanos preguntándose si su país había sido robado por su propio líder. Las irregularidades en el proceso electoral y la manipulación de resultados alimentaron una ola de protestas que resonó en las calles de la capital.
Su gobierno, que se autodenominó como el “milagro mexicano”, implementó reformas neoliberales que prometían modernización y crecimiento económico. Sin embargo, estas políticas concentraron la riqueza en pocas manos y dejaron a la mayoría de la población sumida en la pobreza. El levantamiento del Ejército Zapatista en 1994 fue un grito de auxilio de un pueblo que se sentía traicionado.
Las sombras de su administración se alargaron con la serie de muertes de figuras políticas cercanas a él, lo que generó un clima de miedo y teorías de conspiración que aún persisten. A pesar de haber dejado el cargo en 1994, el impacto de sus decisiones se siente hasta el día de hoy, con un 60% de los mexicanos asociando su nombre con la corrupción.
Mientras Salinas se encuentra en el exilio, su legado sigue dividiendo opiniones. ¿Fue un visionario que modernizó México o un villano que sacrificó a su pueblo por ambición personal? Con cada nuevo escándalo que surge, la historia de Carlos Salinas de Gortari se convierte en un recordatorio de los peligros de la corrupción en el más alto nivel.