Cantemos con el Papa: El Vaticano lanza una iniciativa global de canto gregoriano


La iniciativa “Cantemos con el Papa” ha sido lanzada por el Instituto Pontificio de Música Sacra en Roma, con el objetivo de enseñar a los católicos de todo el mundo a cantar el antiguo canto gregoriano. Este esfuerzo, en colaboración con el Dicasterio para la Comunicación del Vaticano, busca no solo hacer accesible este rico patrimonio musical de la Iglesia, sino también facilitar que los fieles participen activamente en las celebraciones litúrgicas junto al Santo Padre.

 

El padre Robert Milot, del Instituto Pontificio, ha sido el encargado de liderar esta campaña. En una serie de tutoriales breves disponibles en redes sociales, Milot instruye a los espectadores sobre cómo leer y cantar notas musicales sencillas, al tiempo que explica el significado profundo de los textos en latín. “Este proyecto es como un renacer”, afirma el padre Robert, destacando que muchos no disfrutan de los cantos simplemente porque no los conocen.

 

El Papa ha entonado el “Regina Coeli” en varias ocasiones desde el balcón de la Plaza de San Pedro, y la iniciativa busca que la comunidad católica pueda unirse a él en esta práctica. Con su formación monástica y su experiencia en el canto, el Papa ha inspirado a muchos a elevar sus voces junto a él. “Cantar es una forma de oración que glorifica a Dios”, comentó el padre Milot, quien ha recibido comentarios alentadores de los usuarios en redes sociales, indicando que la iniciativa está resonando tanto entre creyentes como no creyentes.

 

La repercusión exacta de estos videos aún no se ha determinado, pero el padre Robert ha recibido testimonios conmovedores, incluyendo uno que menciona haber hecho cantar a un ateo con el Papa. Esta respuesta resalta el impacto que la música puede tener en la espiritualidad y el sentido de comunidad, en un momento en que muchos buscan reconectar con su fe. En un mundo donde la distancia puede ser abrumadora, “Cantemos con el Papa” se presenta como un puente hacia la unidad y la esperanza.