El Papa León XIV se reunió este fin de semana con su hermano John Prevost, un emotivo encuentro que marca su primer reencuentro desde su elección como pontífice. La reunión tuvo lugar en la Basílica de Nuestra Señora en Buen Consejo, ubicada en Genazzano, a aproximadamente 23 millas de Roma. Esta salida del Vaticano, la primera desde su nombramiento, revela la profunda conexión familiar que el Papa mantiene a pesar de sus responsabilidades religiosas.
Fotos exclusivas obtenidas por Univisión muestran a los dos hermanos en un momento privado, donde el Papa, conmovido, extendió su bendición a los habitantes del pequeño pueblo de Genazzano, que recibió su visita con gran alegría. Durante su estancia, el Papa escribió un mensaje en el libro de registro de la basílica, un gesto que resalta la importancia de este lugar, donde se encuentra una pintura de la Virgen que tiene un significado especial en la tradición local.
John Prevost, maestro y director de escuelas en el área de Chicago, viajó a Italia con la ilusión de reencontrarse con su hermano. En una conversación durante su vuelo, expresó su deseo de asegurarle al Papa el apoyo de su familia y del país. “Después de todo este tiempo, poder ver a mi hermano nuevamente es un regalo”, comentó.
El Papa también participó en una misa privada junto a la tumba de San Pedro, acompañado de un reducido grupo de allegados, incluido su hermano John. Se espera que el otro hermano del Papa, de 73 años, viaje al Vaticano en los próximos días para asistir a la misa pontifical presidida por León XIV.
Este encuentro, cargado de significado personal y espiritual, subraya la importancia de los lazos familiares en la vida del Papa, incluso en medio de su elevado rol dentro de la Iglesia Católica. John Prevost regresará a Chicago este martes, llevando consigo recuerdos imborrables de este histórico encuentro.