El Papa León XIV ha revelado ocho signos que indican que una mujer está bendecida por Dios, en un mensaje conmovedor dirigido a sus seguidores. En un discurso apasionado, el pontífice, en su papel como “padre espiritual”, instó a las mujeres a reconocer su dignidad sagrada y su propósito divino, desafiando las definiciones efímeras de la sociedad basadas en riqueza, estatus o apariencia.
El Papa compartió la historia de Felicia, una mujer que, tras años de sentirse invisible, encontró su valor en la oración y la fe, recordando que cada mujer es conocida y amada por Dios, independientemente de su pasado. “Tu existencia no es una mera coincidencia, sino un acto deliberado del amor eterno de Dios”, afirmó, subrayando que las bendiciones de Dios no son solo para el individuo, sino para el bienestar de la comunidad.
Entre los signos mencionados, el Papa destacó la importancia de la oración, la compasión, la resiliencia y la búsqueda de sabiduría divina. “Una mujer bendecida por Dios no enfrenta sus batallas sola; ella se arrodilla en oración y encuentra su fortaleza en la fe”, enfatizó. Además, recordó que el amor verdadero y la compasión son fundamentales, instando a las mujeres a actuar con bondad y a servir a los demás como un reflejo del corazón de Cristo.
El mensaje culminó con un llamado a vivir con valentía y a no dejar que el miedo gobierne sus vidas. “La fe es más fuerte que el miedo”, declaró el Papa, instando a las mujeres a abrazar su llamado divino y a ser luz en un mundo que a menudo se enfrenta a la oscuridad.
Con un énfasis en la unidad y la comunidad, el Papa León XIV concluyó su discurso invitando a las mujeres a compartir sus historias y a unirse en la fe, recordando que cada una es una hija del Rey, destinada a brillar con la luz de Dios.