¡ESCÁNDALO EN COLOMBIA! El ministro del Interior, Armando Benedetti, lanza una feroz crítica contra el registrador nacional, Hernán Penagos, por frenar la consulta popular impulsada por el presidente Gustavo Petro. En declaraciones explosivas, Benedetti califica la decisión de Penagos como un “error grave” y advierte sobre serias “consecuencias institucionales”. La tensión entre el gobierno y la Registraduría alcanza niveles sin precedentes, poniendo en jaque la democracia colombiana.
La controversia estalló cuando Penagos anunció que la Registraduría esperaría la aprobación del Consejo de Estado antes de proceder con la organización de la consulta, argumentando la necesidad de garantizar la legalidad del proceso. Benedetti, sin embargo, no se detiene y afirma que el registrador no tiene la facultad de cuestionar el decreto 0639 emitido por el ejecutivo, que convoca a la ciudadanía a participar. “Su función es operativa, no interpretativa”, enfatiza el ministro.
Este choque de poderes podría sentar un peligroso precedente, donde las autoridades administrativas asumen competencias que no les corresponden, advierte Benedetti. Mientras tanto, Penagos defiende su postura, insistiendo en que su responsabilidad es asegurar que todos los procesos electorales se ajusten a la ley, y niega cualquier enfrentamiento con el gobierno.
La situación es crítica y la incertidumbre crece. La ciudadanía observa con preocupación cómo este conflicto no solo afecta la consulta popular, sino que también podría repercutir en otros procesos democráticos en el futuro. En un país marcado por profundas divisiones ideológicas, la resolución de este enfrentamiento es crucial para el futuro de la gobernabilidad en Colombia. Las instituciones deben actuar con transparencia y respeto para evitar que las diferencias políticas desestabilicen el normal desarrollo de sus funciones. ¡El futuro de la democracia colombiana está en juego!