Miguel Uribe Turbay, precandidato a la alcaldía de Bogotá, ha experimentado una mejora en su estado de salud tras una grave intervención quirúrgica. Luego de 16 días de estar en cuidados intensivos tras un atentado sicarial, el último parte médico de la Fundación Santa Fe revela que su condición ha pasado de “extremadamente grave” a “grave”, lo que ofrece un rayo de esperanza a sus familiares y seguidores.
El comunicado, emitido por la institución médica, indica que Uribe ha recibido tratamiento intensivo, incluyendo una craniotomía para desinflamar su cerebro. Esta intervención se realizó con éxito, y los médicos continúan monitoreando su estado con atención. A pesar de la gravedad de su situación, el pronóstico neurológico sigue siendo reservado.
La noticia de su mejora ha sido recibida con alivio por parte de sus seres queridos y seguidores, quienes han estado vigilando su evolución de cerca. Desde el día del atentado, el 7 de junio, la comunidad ha estado en vigilia, mostrando su apoyo a través de pancartas, flores y velas en la Fundación Santa Fe.
La esposa de Uribe, María Claudia Tarazón, ha compartido actualizaciones sobre su estado en redes sociales, destacando la importancia de la intervención quirúrgica y el avance en su recuperación. Aunque el camino hacia la sanación es largo y lleno de incertidumbres, la noticia de su mejora es un aliento en medio de la angustia.
Este caso ha capturado la atención del país, subrayando la violencia que enfrenta la sociedad colombiana. La situación de Miguel Uribe es un recordatorio de la fragilidad de la vida y la urgencia de abordar la seguridad en el país. La comunidad espera con esperanza y solidaridad mientras Uribe continúa su lucha por recuperarse.