Un tiroteo ha sacudido esta mañana el municipio madrileño de Pozuelo de Alarcón, donde Andrey Pornov, un exasesor del presidente ucraniano Víctor Yanukovych, ha sido asesinado a balazos cerca de un colegio americano. La tragedia ocurrió en pleno horario escolar, generando pánico entre padres y alumnos en la zona. Testigos han informado que Pornov fue alcanzado por cinco disparos, incluidos uno en el cuello que resultó fatal, mientras dejaba a sus hijos en la institución educativa.
Pornov, de 52 años, estaba bajo el escrutinio de los servicios secretos ucranianos por su supuesta afinidad con Rusia y su implicación en el conflicto de Crimea. Fuentes cercanas al caso sugieren que su asesinato podría estar vinculado a operaciones de inteligencia ucraniana, dado su pasado como figura clave en la represión durante las protestas del Euromaidán. Tras el ataque, el autor del crimen huyó de la escena, y se está investigando la posible colaboración de otros cómplices.
Las autoridades han desplegado un amplio operativo en la zona y están analizando las circunstancias del ataque, que ha dejado a la comunidad en estado de shock. Con el telón de fondo de la creciente tensión entre Ucrania y Rusia, este suceso ha elevado el nivel de alerta en España.
Mientras tanto, a nivel internacional, el presidente de EE. UU., Donald Trump, ha lanzado advertencias a Rusia, prometiendo una respuesta contundente ante cualquier provocación, lo que añade un aire de urgencia a la situación geopolítica actual. La intersección de estos eventos pone de manifiesto la inestabilidad que enfrenta Europa, haciendo de este un momento crítico tanto a nivel local como global.
Las investigaciones continúan y se esperan declaraciones oficiales en las próximas horas. La comunidad permanece atenta, mientras la situación se desarrolla en medio de un clima de incertidumbre y miedo.