Como Obispo en Perú, el Papa León XIV conoció a la Familia Vicentina


El Papa León XIV, en su reciente visita a Perú, ha reafirmado su compromiso con la comunidad de Chiclayo y la familia vicentina, destacando su cercanía con los más desfavorecidos. Durante un emotivo encuentro, el Papa, quien fue obispo de la diócesis de Chiclayo, recibió un cálido recibimiento de estudiantes y miembros de la comunidad, quienes expresaron su alegría al recordarle como “el Papa de Chiclayo”.

La participación del Papa en la inauguración de “Villa San Vicente” en 2019, un proyecto que busca ofrecer refugio a los más necesitados, ha sido uno de los hitos más significativos de su labor en la región. Los miembros de la familia vicentina han elogiado su enfoque directo y accesible, así como su dedicación a las causas sociales, especialmente en un contexto donde la violencia y la delincuencia amenazan la paz en el país.

El Papa León XIV ha instado a la comunidad a prestar atención a su mensaje de paz, subrayando la importancia de la unidad y la cercanía con aquellos que sufren. En un momento crítico para Perú, su llamado a la paz resuena con especial fuerza, recordando a todos la necesidad de trabajar juntos para superar la adversidad.

Los vínculos que el Papa forjó durante su tiempo como obispo en Chiclayo continúan siendo fuente de inspiración. Los integrantes de la familia vicentina han expresado su gratitud por su apoyo constante, el cual ha permitido que iniciativas de ayuda a migrantes y comunidades vulnerables florezcan en la región.

La figura del Papa, descrita como un pastor que “huele a ovejas”, se ha consolidado como un faro de esperanza, no solo para Chiclayo, sino para todos aquellos que buscan consuelo y guía en tiempos difíciles. Su mensaje resuena en cada rincón del mundo, recordándonos que la compasión y la acción solidaria son fundamentales para construir un futuro más justo y pacífico.